viernes, 6 de marzo de 2009

Bienvenidas...


Deseo que estemos "sobre la soga" y no bajo de ella. Pasar a ese nivel exige ciertos requerimientos... el más importante es querer hacerlo.
Esta es una prueba, a ver si les llega a todas y podemos hacer de este lugar, un espacio para difundir conocimiento.
Un abrazo
Acuarela

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Hermosa iniciativa Acuarelita. Querer es poder, cierto?, quiero estar sobre la soga y debo identificar cada uno de los "impedimentos rojos" que están bajo y sobre de ella. Probablemente los paradigmas y costumbres que nos han tenido atados a los miedos, impiden el ascenso. Pero pienso, quiero llegar, alcanzo uno de los impedimentos que califico como temor a lo desconocido, que sentiré estando sobre la soga? libertad?, quién puede darme una pista?, qué son los cositos rojos?

Anónimo dijo...

fíjate que le sigo buscando la vuelta, y con este reto me sucede lo mismo que con aquel proverbio profundo que te hace exprimirte los sesos y dice así:
Tres cosas me son ocultas; aún tampoco sé la cuarta:
el rastro del águila en el aire;
el rastro de la culebra sobre la peña;
el rastro de la nave en medio del mar;
y el rastro del hombre en la doncella.
Qué significa estar sobre la soga?, libertad? insisto.

Unknown dijo...

DESIDERATA

Anda plácidamente entre el ruido y la prisa, y recuerda la paz que se puede encontrar en el silencio. En cuanto te sea posible, Vive en buenos términos con todas las personas, enuncia claramente tu verdad; escucha a los demás, incluso al torpe e ignorante; ellos también tienen su historia.

Evita las personas ruidosas y agresivas, pues son un fastidio para el alma, Si te comparas con los demás, te volverás vano y amargado; porque siempre habrá personas más grandes y más pequeñas que tú. Disfruta de tus logros así como de tus planes.

Mantén el interés en tu propia carrera, por humilde que sea; ella es un tesoro en el fortuito cambiar de los tiempos, se cauto en tus negocios; pues el mundo está lleno de egoísmos, Pero no te cierres a la virtud que hay en ella; mucha gente se esfuerza por alcanzar nobles ideales; y en todas partes la vida está llena de heroísmo, se tú mismo. En Especial, no finjas el afecto. Tampoco seas cínico en el amor; porque en medio de toda la aridez y desengaños, es perenne como la hierba.

Acata dócilmente el consejo de los años, abandonando con donaires las cosas de juventud. Cultiva la fuerza del espíritu para que te proteja en la adversidad repentina. Pero no te angusties con fantasmas.

Muchos temores nacen de la fatiga y la soledad. Junto con una sana disciplina, se benigno contigo mismo. Tú eres una criatura del universo, no menos que las plantas y las estrellas; y tienes derecho a existir, y sea que te resulte claro o no, el universo marcha como debiera.

Por lo tanto, mantente en paz con Dios, cualquiera sea tu modo de concebirlo y cualesquiera sean tus trabajos y aspiraciones, mantén la paz con tu alma en la bulliciosa confusión del planeta, que con todas sus farsas y sueños fallidos, sigue siendo hermoso. Ten cuidado. Esfuérzate por ser feliz.
Anonimo

Unknown dijo...

Este siempre ha sido uno de los escritos que he encontrado que siempre me ha gustado, y lo tengo muy presente en todos lados...
Saludos
Maria Elena

Acuarela dijo...

Los "cositos" rojos son coquitos o mariquitas como les llaman en algunos lugares. Particularmente visualizo el tronco que ata la soga como el pedestal, la Fuente, la Vida, nuestra seguridad, nuestro pilar. La soga es, a mi entender la conexión entre la fuente y lo cotidiano, la vida humana, lo natural. Sobrepasar la soga y seguir ascendiendo a través del tronco es el camino. Más arriba, puedo suponer que hay más sogas, muchas más, sin embargo, como los coquitos, la perseverancia, la fortaleza, las herramientas aprendidas, nos darán la base para saltar sobre ellas y seguir el ascenso. Esta es mi visualización de la imagen.

Unknown dijo...

Un señor de unos 70 años viajaba en el tren, teniendo a su lado un joven universitario que leía su libro de Ciencias. El caballero, a su vez, leía un libro de portada negra... Fue cuando el joven percibió que
se trataba de la Biblia y que estaba abierta en el Evangelio de Marcos.

Sin mucha ceremonia, el muchacho interrumpió la lectura del viejo y le preguntó:

- Señor: ¿usted todavía cree en ese libro lleno de fábulas y cuentos?

- Si, mas no es un libro de cuentos, es la Palabra de Dios... ¿Estoy equivocado?

- Pero claro que lo está. Creo que el señor debería estudiar Historia Universal. Vería que la Revolución Francesa, ocurrida hace más de 100 años, mostró la miopía de la religión. Solamente personas sin cultura todavía creen que Dios hizo el mundo en 6 días. El señor debería conocer un poco más lo que nuestros científicos dicen de todo eso.

- Y... ¿es eso mismo lo que nuestros científicos dicen sobre la Biblia?

- Bien, como voy a bajar en la próxima estación, no tengo tiempo de explicarle, pero déjeme su tarjeta con su dirección para mandarle material científico por correo con la máxima urgencia.

El anciano entonces, con mucha paciencia, abrió cuidadosamente el bolsillo derecho de su bolso y le dio su tarjeta al muchacho.

Cuando éste leyó lo que allí decía; salió cabizbajo, sintiéndose más pequeño que una ameba.

En la tarjeta decía:

"Profesor Doctor Louis Pasteur, Director General del Instituto de Investigaciones Científicas, Universidad Nacional de Francia."

'Un poco de Ciencia nos aparta de Dios, mucha nos aproxima'.
Louis Pasteur